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Guía del parto

Preparación de la perra para el parto

Hacer un "nido"

La hembra necesitará un rincón de la casa privado donde poder relajarse y dar a luz a sus cachorros sin ser molestada, por lo que debes hacerle un "nido" en las dos últimas semanas de su gestación.


El nido ideal para el nacimiento de los cachorros es una caja de cartón grande y acolchada con mantas, sábanas o toallas limpias. La caja ha de ser lo suficientemente grande para que quepan cómodamente la mamá y su camada, y para que la madre pueda tener su propio espacio si lo desea.


¡Asegúrate también de que la caja sea lo suficientemente alta para evitar que los cachorros aventureros se escapen!.


Coloca el nido en un lugar tranquilo a temperatura ambiente, donde pueda estar cómoda y nadie la moleste. Colocar su cama o juguetes en el nido (siempre y cuando estén limpios) puede animarla a usarla y a sentirse cómoda antes del parto.


Signos que debes saber interpretar

Uno de los primeros signos de la inminencia del parto es un descenso de la temperatura corporal de la madre, normalmente un grado menos de su temperatura habitual, por ejemplo de 37,5 °C a 36,5°C, aproximadamente de 12 a 24 horas antes del parto.


Para saber cuándo ocurre esto, toma la temperatura a tu perra dos veces al día con un termómetro rectal durante la última semana de su gestación.


Durante la última semana de la gestación, las futuras mamás pueden mostrarse algo inquietas y retirarse a un lugar tranquilo.


Durante las 12-24 horas anteriores al parto suelen perder el apetito y "escarbar" su cama con frecuencia.


En raros casos, la perra podría mover el nido que le has hecho a otro lugar de la casa. Si esto ocurriese, intenta respetar su lugar preferido si es posible.

Las fases del parto canino

En general, el nacimiento de los cachorros es sencillo y no suele haber complicaciones. Aunque debes interferir lo menos posible, es importante que estés presente durante el nacimiento de los cachorros para poder intervenir y ayudar a la madre si surge algún problema. El parto suele durar entre 3 y 12 horas, y se produce en tres fases.

1. Primera fase
  • El cuello uterino y el útero se preparan para el parto con pequeñas contracciones que pueden pasar inadvertidas para ti.

  • La vulva de tu perra empezará a hincharse preparándose para el parto.

  • Durante esta fase del parto, las perras pueden estar muy inquietas y agitadas, jadear y temblar, pero no te preocupes: es completamente normal.

2. Segunda fase

La segunda fase es el nacimiento de los cachorros que suele durar entre 3 y 12 horas, aunque puede alargarse hasta las 24 horas.

  • Notarás contracciones fuertes seguidas de un flujo claro en la vulva de tu perra, lo que indica que el cachorro nacerá en los siguientes 20-30 minutos.

  • Los cachorros suelen nacer con intervalos de 20 minutos entre sí, aunque es habitual que la mamá se tome un descanso durante el parto, e incluso podría no esforzarse en absoluto durante 2 horas entre cachorros (a veces pueden pasar hasta 4 horas entre un cachorro y otro). Permanece atento al parto de la perra y ponte en contacto con tu veterinario si ves que descansa durante más de dos horas.

  • Es normal que alguno de los cachorros nazca de nalgas, pero no te asustes si eso ocurre.

  • La mamá morderá las placentas y los cordones umbilicales de los cachorros y luego empezará a limpiarlos. Si ves que la madre intenta morder el cordón demasiado cerca del perrito, detenla y hazlo tú mismo.

  • Si el parto dura mucho tiempo, la mamá puede tener que hacer sus necesidades entre el nacimiento de un cachorro y el de otro.

  • Una secreción verdosa/marrón puede indicar que una placenta se ha separado. Si ves esto, el cachorro debería nacer en las próximas 2-4 horas. Si no ocurriese así, llama a tu veterinario porque puede existir alguna complicación en el parto de los cachorros.

3. Tercera fase
  • Las placentas deben salir tras el nacimiento de cada cachorro.

  • Comprueba cuántas placentas han salido (vigila si come alguna), para saber si alguna queda dentro de la mamá. Si crees que puede ser así, contacta con tu veterinario porque puede ser necesaria su intervención.

  • Algunas veces, durante el parto, las perras se comen las placentas para obtener energía y las vomitan después. Esto entra dentro de lo normal, pero ponte en contacto con tu veterinario si los vómitos continúan.


Ayuda al parto

Por suerte, seguramente no tendrás que intervenir durante el parto de tu perra, aunque algunas veces la nueva mamá necesitará un poco de ayuda. Hay algunos casos en los que puede ser necesaria tu intervención.

  • Un cachorro podría necesitar ayuda mientras su madre está dando a luz a otro. En ese caso, retira la membrana que envuelve al cachorrito y sécalo rápidamente a contrapelo con un paño limpio. Este movimiento de fricción también ayudará al cachorro a empezar a respirar.

  • Si la madre no ha limpiado a un cachorro, éste puede tener fluidos en sus vías respiratorias. Pasa tu meñique limpio por el interior de su boca para retirar las posibles obstrucciones y límpiale la nariz. Frótalo con una toalla para ayudarle a llorar, ya que eso limpiará los fluidos que pueda haber tragado.

  • Si la mamá está ocupada alumbrando a otro cachorro, puedes ayudarla cortando el cordón umbilical del cachorro que acaba de nacer. Para ello, haz un nudo con un hilo fuerte a aproximadamente a 1,5 cm del punto en que el cordón se une al cuerpo del perrito. Haz otro nudo un poco más lejos del primero y usa unas tijeras limpias para cortar el cordón entre los dos nudos. Si cortas el cordón demasiado cerca del cachorro puedes poner en riesgo su salud, y si lo dejas demasiado largo podría ser masticado o tragado por su madre.

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